5. Las lenguas de fuego repartidas: El Espíritu habla por cada uno

"Se aparecieron unas lenguas como de fuego, que se repartieron y se posaron sobre cada uno de ellos". No apareció una sola, sino que se distribuyeron sobre cada uno. Cada lengua fue distinta. El Espíritu Santo está presente en cada uno que lo recibe y lo acoge. La comunión se construye cuando cada uno escucha al otro, al Espíritu que habita en el otro, con respeto y reverencia. Hay un mismo Espíritu, posado en cada uno de manera distinta.

Escuchar en Spotify