Muy querida Familia de Magdala, queridos amigos:
Les escribo estas líneas desde la Ciudad de México, a donde vine por unas gestiones desde hace unos días. Ayer tuve la gracia de concelebrar la Eucaristía con el Sr Cardenal Carlos Aguiar Retes, Arzobispo Primado de México, y ofrecerla por la Paz de Tierra Santa y del Medio Oriente.
También el Papa León lo hizo, y pidió a todos los creyentes el unirnos en oración por la paz del mundo.
Es verdad que tenemos el alma en vilo ante el desarrollo del conflicto bélico, y sentimos una profunda impotencia. Pero nuestra esperanza y nuestra fe en estos momentos nos dicen que hemos de confiar en Dios; que los entresijos de la historia humana están tejidos de modo misterioso entre el bien y el mal, pero que Dios ha vencido al mundo.
Además, estamos en la novena de preparación para la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, que celebramos este viernes. Resuenan en el corazón las palabras de la jaculatoria: “Sagrado Corazón de Jesús, en Vos confío”. Sí, la confianza en Dios nos coloca muy por encima de las vicisitudes del momento, no en un escape espiritual o en un desentendimiento egoísta o simplón, sino en la certeza de que el poder de Dios triunfa. Si echamos un vistazo a la historia de la humanidad, los que confían han sido siempre los que han vencido.
Mientras tanto, algunos eventos han ocupado nuestras miradas. Quisiera volver con ustedes por un momento sobre la inauguración de la Sala de Pentecostés, ocurrida los días 7 y 8 de junio recién pasados. Tuvimos la gracia de vivirla aún en días de mayor tranquilidad. El Cardenal Patriarca de Jerusalén, Pierbattista Pizzabala, nos honró con su presencia y sus palabras.
Numerosos amigos, bienhechores y fieles pudieron participar presencial y digitalmente, sea en la novena de preparación, como en el evento mismo. Ahora nos queda el recuerdo gozoso de esos días. El Espíritu Santo descendió sobre la Iglesia hace dos mil años, y se ha quedado con ella y en ella. El Espíritu Santo cuyos dones y frutos tanto necesitamos es nuestro consuelo y sostén eternos. A Él dirigimos nuestra súplica ardiente de guiar los destinos de los pueblos, como también los corazones y las mentes de los líderes que gobiernan las naciones y deciden sus derroteros. “Ven, Espíritu Santo, ven”.
Y ahora sí, comenzaron a caer las últimas páginas del calendario antes de nuestro Encounter Magdala 2025, en Madrid. Queda ya menos de un mes. Les recuerdo que aún se pueden inscribir hasta el 15 de julio. Con gran alegría he saludado en estos días a numerosas personas que irán desde México para esos días de fe, de convivencia, de oración y peregrinación. Confiamos también este evento al Corazón de Jesús y a su poderoso amor, para que las personas que habrán de ir reciban todas las gracias y dones que Dios quiera derramar en sus corazones.
¡Nos vemos en Madrid! Regístrate aquí, los registros se cierran el 15 de julio.
Mientras tanto, seguimos agradeciendo de corazón su apoyo y sus oraciones en este período en que tanto los necesitamos.
Fraternamente,
P Juan María Solana LC y equipo de Magdala
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