El pasado día 14 de julio se cumplió el décimo aniversario de la muerte de Don Eduardo Sánchez Junco (Palencia, 1944 – Madrid, 2010).
No podemos, ni queremos dejar pasar la ocasión para hacer un recuerdo de él, y pedir a la Familia de Magdala una oración por él y por su familia. ¿Motivo? Fue el primer bienhechor de Magdala.
Don Eduardo visitó Tierra Santa con su familia entre finales de abril y principios de mayo del año 2005. Yo acababa de llegar a Tierra Santa, pero ya tenía la intención y el permiso de hacer el proyecto de Magdala. Le planteé la posibilidad de ayudarme y al día siguiente me dio una respuesta afirmativa.
No deja de sorprenderme, hasta el día de hoy, esa respuesta que me hizo llamarle “El anzuelo de Dios”, pues cuando él me comunicó que sí me ayudaba, yo pensé: “Ya no hay marcha atrás. Ahora, a seguir siempre hacia delante”.
Quiero dejar constancia, pues, a los diez años de su muerte, del grande ejemplo que me dio Don Eduardo, a quien yo llamaba cariñosamente “El Jefe” por su profundo sentido religioso, por la delicadeza de su conciencia y por su grande magnanimidad y generosidad.
En este aniversario elevamos una oración agradecida a Dios por él y un recuerdo y saludo cariñoso a su familia.